Nuestro país tiene una diversidad de climas increíblemente rica, y durante la primavera y el verano, podemos considerar que hace calor en la mayor parte de nuestro territorio.
Cuando pensamos en un lugar para descansar o para organizar un evento, muy especial, como puede ser una boda, inmediatamente pensamos en lugares calurosos, como puede ser Cuernavaca, Acapulco, Valle de Bravo, Puerto Vallarta, etc.
Si vas a tener un evento al aire libre en un lugar en el que hace calor, considera que una temperatura elevada, provoca que el alcohol del vino se evapore, y que sea más perceptible que los aromas de la fruta o de la barrica.
Por lo anterior, lo primero que hay que cuidar es que el vino esté siempre frío, y servir dosis pequeñas para evitar que se caliente en la copa. Además de esto, busca vinos espumosos o blancos, que son más frescos en boca, y que por lo general son ácidos, lo que ayudará a maridarlos con platillos frescos, ligeros o ácidos.
Si prefieres vino tinto, busca un vino que tenga menos de 6 meses de crianza en barrica, o incluso que no tenga barrica; lo que se conoce como vinos jóvenes. Sírvelo a tus invitados a una temperatura baja, de entre 12 y 14 grados. Busca un vino que tenga menos de 14% de alcohol. Algunas de las uvas que te pueden ayudar para este tipo de eventos son gamay, pinot noir, merlot o cabernet sauvignon.
